Ian Mckellen en una entrevista (Habla de Orlando)El actor anticipa la segunda entrega de El Hobbit, que se estrena este jueves, en la que vuelve a encarnar al famoso mago. Asegura que su personaje "es un buen modelo para que admiren los jóvenes".
Por: Nicolás Peralta
Hace tres años un peatón de Melbourne, Australia, se encontró a un hombre mayor, de pelo blanco y cara triste, muy mal vestido, sentado en un banco y con un sombrero en la mano. Le preguntó "¿Necesitas ayuda, hermano?" y le dejó en el sombrero una moneda. El hombre se quedó muy sorprendido porque no era ningún mendigo sino Sir Ian McKellen, el actor que vuelve a encarnar a Gandalf en El Hobbit: La desolación de Smaug, que este jueves llega a los cines.
McKellen iba, en ese entonces, a representar Esperando a Godot en el teatro y en una prueba de vestuario de la obra salió a tomar aire vestido como su personaje. Alguien lo vio, pensó que estaba pidiendo, y le dio limosna. Al otro día lo hizo con un fotógrafo, para que quedaran imágenes. Por estos días, McKellen lleva la obra de Beckett a Broadway. Otra vez los medios y los internautas están recordando la anécdota y difundiendo las imágenes. En este tipo de casos siempre quedará la duda de si realmente es un renacimiento espontáneo, o si es un mecanismo de promoción. Lo cierto es que el gran actor inglés vuelve a la Tierra Media.
Forzado por las exigencias de rodaje en Nueva Zelanda, orientado a efectos visuales del director Peter Jackson, el actor debió trabajar en aislamiento durante largos períodos de tiempo para que se creara la falsa perspectiva con Hobbits y enanos. McKellen tuvo que ser filmado por separado, en un conjunto de pantalla verde, y los fondos y otros caracteres se pusieron más tarde en la sala de edición ."Fue muy angustioso y desagradable y tan difícil que pensé ' No quiero hacer esta película, si esto es lo que voy a tener que hacer ", afirmó el actor. "No es lo que hago para ganarme la vida. Actúo con otras personas, no actúo por mi cuenta."
–Gandalf estuvo en todas las películas de El Señor de los Anillos y estará en las tres películas de El Hobbit ¿Qué significa para un actor?–Suena como una gran responsabilidad y no lo sentí así. Fue un año maravilloso de trabajo para mí, y el hecho de que la saga dure tanto tiempo es un honor. Normalmente uno hace su parte y eso es todo. A veces, si tenés suerte, te dan la chance de repetirla y eso te hace crecer. Pero no siento como 'Oh, Dios, tengo que ir y hacer Gandalf de nuevo'. No lo siento como algo pesado. Estas historias son tan maravillosas y las producciones y el elenco es tan variado y entretenido que me encanta. Además adoro ir a Nueva Zelanda, donde filmamos. El resultado es muy agradable y me permite conocer a gente de todas las edades fanática de la película.
–¿Qué aspectos el personaje deja ver en estas películas y qué crees que lo hace único entre los otros magos de la Tierra Media?–Yo no soy un gran experto en J.R.R. Tolkien, pero hay cinco Magos mencionados en las historias. De Gandalf me gusta que es popular porque está siempre cuidando la Tierra Media, es su trabajo. Él está ahí para hacer su mejor esfuerzo para alertar de los peligros y tratar de ponerlos a la vista. Él comete errores, pero siempre está bien intencionado. Creo que uno de los momentos más reveladores se encuentra en la primera película, cuando Bilbo ofrece el anillo a Gandalf y él dice: "No, no, no me lo des a mí. Ni siquiera yo puedo ser confiado con él, es tan poderoso". Pero volviendo a la pregunta, no se puede pensar en eso como actor. Ser eterno, no es algo que realmente se puede asumir. De hecho, lo que me gusta de Gandalf es que él es tan humano. Le gusta fumar y tomar una bebida, ama a los Hobbits y le gusta estar en la comarca. No hay nada malvado acerca de Gandalf y así es él. Es un muy buen modelo para que lo admiren los jóvenes.
–¿Porqué esa admiración por los Hobbits?–Gandalf reconoce en ellos lo bueno: que son incondicionales y tienen una fuerza interior que otras personas podrían pasar por alto debido a su condición física y su comportamiento. Piensa que lo que a veces se necesita es sólo un Hobbit que hará su mejor esfuerzo. A menudo pienso que son como gente común que hace algo heroico: personas que hacen cosas inesperadas. Y Tolkien y Gandalf reconocen eso. Lo hacen con el personaje de Bilbo.
–Los que leyeron los libros saben que Gandalf se va, pero en esta película, podemos ver a dónde. ¿Puede hablar de ese viaje?–En el libro, Gandalf tiene que irse. Y el lector no llega a saber por qué, pero Tolkien sabía, y en sus notas y en sus otros escritos hizo referencia a las características específicas de sus responsabilidades, no sólo de Gandalf, sino de los Enanos, Elfos, de la Tierra Media en general. No quiero ir demasiado lejos, pero hay algo que hacer en la Tierra Media. Hay una misión. Se hace referencia a eso en todas las películas. Que el público arme sus ideas, sus conclusiones
–Para los demás, ¿es duro seguir adelante sin él?–Sí, esos son el tipo de dilemas que se plantean, no puede estar en dos lugares a la vez, por mucho que a él le gustaría hacerlo. Él a veces simplemente tiene que dejar a la gente que quiere para seguir adelante con la tarea que se les ha dado para hacer. Pero esa es la naturaleza de ser su propio comandante. Se va y vuelve solo si es necesario. Entonces los otros personajes dejan descubrir sus fortalezas internas. Supongo que eso es parte de cómo estas historias fueron pensadas. Si tienen a Gandalf con ellos todo el tiempo, tienen la solución de todos sus problemas a medida que se vuelven más complicados. Esto le quitaría elementos para que fuera una aventura.
–¿Qué piensa acerca de Thorin?
–Thorin es un joven testarudo, y consciente de su linaje, y él probablemente tiene demasiado orgullo para los gustos de Gandalf, quien preferiría que haga las cosas a su manera, pero eso no depende de él. Él tiene sus dudas sobre si Thorin realmente tiene la fuerza interior y exterior para lograr el trabajo.
–¿Qué crees que Martin Freeman aporta al papel de Bilbo?–Como actor, él trae una enorme experiencia. Yo soy un verdadero fan de su trabajo, no sólo en la pantalla, sino también en el escenario. Lo he estado siguiendo desde hace años y ha sido una de las grandes alegrías llegar a aprender de él y convertirse en su amigo. Es un actor muy, muy talentoso. Es muy elogiado y con razón, pero verlo trabajar es siempre emocionante, sobre todo en el cine. Tiene grandes líneas y durante sus primeros planos, por ejemplo, te dan una oportunidad para examinar realmente cómo el actor está trabajando. Por eso sé que Martin es bueno, lo admiro enormemente. Él fue brillante en el casting, el papel fue absolutamente suyo en un segundo.
–Lo malo es que por el tema de filmar separados no pudo compartir escenas con él. ¿No?–Siempre fue un gran alivio actuar con personas de mi propia altura, como
Legolas o los Elfos. Con los Enanos y los Hobbits era una gran lástima pero soy realmente un gran admirador de Martin. Y creo que va a ser maravilloso verlo hacer más cosas en la pantalla.
–¿Qué se siente reunirse con Orlando Bloom y su personaje, Legolas?
–Estuve con Orlando gran parte de la película. Es irónico, porque estamos casi compartiendo un apartamento en Nueva York, donde él está por hacer Romeo y Julieta en Broadway y yo voy con algo de Beckett. Siempre estar con él es algo bueno.
–¿Puede hablar de su relación con Peter Jackson, y lo que ha sido trabajar con él durante todos estos años juntos?–Es una de las grandes alegrías de mi carrera. Me gusta andar con él, su familia y sus amigos, que están siempre por ahí. Crean una atmósfera que es ideal. Es una de esas cosas que ha hecho el trabajo más agradable. En el set, siempre hay alegría en las películas del señor Jackson, se trabaja muy duro, pero siempre hay tiempo para reír. Peter es el jefe supremo y organizador, pero nunca te sentís en desventaja con Peter. Él siempre quiere tu aporte y eso lo hace genial. Si no fuera él el director, yo no habría hecho estas películas.
Bilbo no se cree estrellaBilbo es el protagonista y el actor británico que lo interpreta se llama Martin Freeman, quien, a pesar de su éxito mundial de taquilla, no piensa que es una "estrella".
"Mucha gente ha visto la primera película, pero no me reconocen tanto", asegura. Martin disfrutó de filmar "emocionantes escenas, pero nada demasiado loco", agrega.
Cuando se le preguntó al actor, quien fuera también estrella de la versión inglesa de The Office, donde hacía de partener de Ricky Gervais, cuál fue su escena favorita de esta segunda película, dijo: "Me gusta cuando las cosas son muy interesantes y pueden ser algo peligrosas... pero sin ser una locura. Yo no quiero morir frente a una cámara", bromeó.
Jackson: el padre de la criaturaEl guionista, productor y director de cine neozelandés, Peter Jackson, ganador de los premios Oscar, Globos de Oro y BAFTA por sus películas de El Señor de los Anillos y que fue nombrado miembro de la prestigiosa Orden de Nueva Zelanda, apareció en persona en Wellington, en tanto que otros miembros del elenco, entre ellos Orlando Bloom, Evangeline Lilly, Andy Serkis y Richard Armitage, se presentaron en otras ciudades.
Jackson y los miembros del elenco aparecieron en vivo frente a espectadores en teatros en ciudades como Wellington, Los Angeles, Nueva York y Londres, semanas antes del estreno de la segunda entrega de la trilogía inspirada en los libros de J.R.R. Tolkien, El Hobbit: La desolación de Smaug.
Mientras que sus seguidores estaban disfrazados de hobbits, elfos y dragones, Jackson, quien vestía una camisa blanca arremangada y estaba descalzo, bromeó diciendo que ese era su disfraz. "Las últimas diez semanas de grabación que hicimos en mayo, junio y julio de este año estuvieron, creo, entre las diez semanas más intensas que pasé grabando en mi vida", dijo a sus fans. "Tuvimos algunas escenas increíblemente intensas desde el punto de vista emocional. Normalmente, en una película uno tiene escenas quietas y escenas culminantes y todo se nivela, pero estas fueron diez semanas de cosas muy intensas", añadió el director. Jackson señaló que era difícil describir el último día de filmación sin recurrir a estereotipos. "El último día siempre es emotivo porque uno está tratando con la despedida. Uno está diciendo adiós a amigos del equipo y del elenco y obviamente en esta instancia particular, tras seis películas, es como decir: ¿está ocurriendo esto?", relató.
Pero más allá de eso, "existe una sensación de alivio... finalizar el rodaje significa que ahora puedo comenzar a editar y a realizar la postproducción de esta segunda entrega", explicó Jackson.
Contra el dragón Smaug Esta película, El Hobbit: La desolación de Smaug, narra la continuación de la aventura de Bilbo Baggins en su periplo junto al mago Gandalf y trece Enanos liderados por Thorin "Escudo de Roble", en una épica búsqueda para recuperar la Montaña Solitaria y el Reino Enano de Erebor. Tras sobrevivir al inicio de su inesperado viaje, la compañía sigue hacia el este y se encuentra por el camino con Beorn, el cambiador de piel, y con un enjambre de Arañas gigantes en el peligroso monte Mirkwood. Tras evitar que los Elfos del Bosque los capturen, los Enanos prosiguen su viaje hacia Ciudad del Lago, y finalmente llegan a la Montaña Solitaria, donde tienen que enfrentarse al mayor de los peligros, una criatura más terrorífica que cualquier otra: el dragón Smaug.
Fuente: http://todoshow.infonews.com/
