SUEÑOS DORADOS Y ESMERALDAS CAP. 4, Verdades

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la_unica_sra_d_sparrow
view post Posted on 13/1/2013, 07:21






Cap. 4 Verdades

Su actitud que demostraba una serena quietud la hizo calmarse. Pero no le gustaba que él se comportara así, tan fríamente. Y no podía perdonarle las absurdas críticas y recriminaciones infundadas de que acababa de ser sujeto.

- ¿Ya te cansaste de Victoria Brownwood?- aguijoneó Candice.
- Por favor...no hagas este momento más difícil.
- Lo siento...pero bueno...habla de una vez...¿para qué quieres hablar conmigo? ¿Quieres, acaso, seguirme reprochando que esté aquí, que tenga amistades...que no sea la misma que tú dejaste hace años?
- Basta, Candice...no fue para eso que te llamé para hablar...pero ahora que lo mencionas, sí tengo un fuerte reproche que hacerte...

- Otro más...¿no te cansas de reprochar cosas, Terruce? Si se trata de reproches, yo también tengo muchos que hacerte.

"Otra vez Terruce...si vuelves a llamarme así de nuevo me volveré loco, Candy..."

- Bien...seré caballero y te dejaré que empieces con el sermón...seguro eso lo aprendiste muy bien de la hermana Grey en el colegio San Pablo, ¿cierto?

"No comiences, Terry..."- pensó ella.- "No deberías recordarme todo eso sin que yo pueda un sólo segundo desear que el tiempo volviera atrás..."

- No...quizás así soy...ya que me das autorización de comenzar con los reproches, empezaré...el primero de ellos...¿por qué en todo este tiempo no has venido a felicitar a Albert?

- En primer lugar, porque yo no sabía que Albert estaba aquí...aunque me sorprende que sepas que no había venido a las reuniones.

- No te debería sorprender...se supone que yo no salgo de ellas...¿no dijiste eso hace un momento?

- Lo siento...esa era una de las cosas por las que quería disculparme...no sabía que tenías mucho tiempo de no venir.

-Desconoces muchas cosas sobre mí, Terruce Grandchester...

- Deja ese nombre de una vez, Candy...-soltó al fin.

Eso mantuvo a ambos en un ligero silencio que les permitió respirar un poco.

- Perdóname, Terry...creo que...ha habido mucha tensión...
- Lo sé...perdóname tú a mí...realmente estaba ofuscado...¿quieres...sentarte?

Ambos se sentaron en un sillón junto a una lámpara que despedía tenues rayos rosados.

"No puedo dejar de mirarte completa...ese moño rosa que decora el pliegue que desdibuja tu pecho...que enmarca deliciosamente el comienzo de tus senos...y la delicada línea que degrada peligrosamente tus brazos...la caída de tu cabellera dorada sobre los hombros...Candy...esta visión tuya sólo me está matando de ansiedad..."

- Bien, ya que estamos sentados, puedes continuar con el sermón...

- Terry...bien...continuaré. Supe que no has vuelto a ver a tu madre en más de un año...

- Veo que estás bien informada.
- No del todo porque realmente no sé por qué...

Terry bajó la mirada.

- En vista de que estamos hablando después de mucho tiempo, te lo diré. Mi padre insistió en que dejara de hablar con mi madre, por lo menos mientras él estuviera enfermo...o despediría a la madre de Mark.

- ¿Eso hizo?
- Sí...mientras buscaba otro trabajo para ella pensé en continuar así, cerca de mi padre por el momento. Y de paso, aproveché para quedarme con algo de su fortuna...es como una especie de venganza por todo lo que me ha hecho.

"Terry...eres igual...no has cambiado..."- pensó Candy. "Pero no deberías ser tan duro..."

- Si tu padre está enfermo, deberías cuidarlo durante un tiempo.

- Bien...terminaste el sermón, supongo. Ahora es mi turno...

Candice trató de imaginar a qué tipo de reproche se referiría Terry esta vez.

- Habla, Terry, aunque no entiendo qué reproche puedes hacerme...

Terry respondió.

- ¿Por qué no fuiste a Nueva York el verano pasado? Envié invitaciones al hospital St. Joseph y no fuiste...

Candy tembló. Sus palabras reclamaban su presencia.

- No quise ir...-declaró Candy.- Realmente no quería encontrarme contigo...

Las palabras de la hija adoptiva de los Andrew resonaban en su interior.

- Ya veo...has preferido dedicarte a ser enfermera y no querías siquiera posar tus ojos en un actor borracho y mujeriego.

- Terry...no es eso...

- No digas más- comentó Terry volviendo el rostro atrás.- No necesitas darme explicaciones. Es verdad...he tenido reveses pero todo eso he tratado de superarlo solo...si uso el apellido de mi padre ha sido solamente por conveniencia pero pienso desligarme de él. Pensé que tal vez ahora podría agradecer que ese apellido me permitiera volver a verte pero según veo...creo que no ha valido la pena.

Candy decidió no llorar.

- ¡Eres un orgulloso, Terry! Sólo píensas en ti. Yo no fui quien me dejó en medio de la bruma aquella tarde en Nueva York.
- ¿Ah, no? ¿Y quién fue entonces la que corrió escaleras abajo, a pesar de que yo la aprisioné con mis manos en su cintura inclinando mi pecho en su espalda, sintiendo que se quebraba en mil pedazos?- levantó la voz, casi gritando.

Candy rogó.

- Terry...habla más bajo, por favor...

El hijo del duque de Grandchester se contuvo. Ella le dio la espalda y trató de no llorar.

"Soy un infeliz. La he vuelto a ver y sólo la he hecho llorar...soy un cobarde..."

- Candy...creo que de reproches ha estado bien...quiero que sepas que me alegra mucho que estés con bien, después de estar en el frente como enfermera militar. La señorita Pony y la hermana María deben estar muy orgullosas de ti, ¿cierto?

Los ojos de Candy se repusieron.

- Gracias...
- No...es verdad...¿sabías que el invierno pasado estuve ahí?

Eso hizo temblar a la joven.

- ¿Estuviste en el hogar de Pony?
- Sí...sólo que le pedí a las dos que no te dijeran nada...
- Cretino...

Los ojos del joven actor se incendiaron de un fuego intenso.

- Estuve en Lakewood...gracias a Archie conocí el rosal de Anthony...conocí a las dulce Candy...

Candy trató de acallar su corazón.

- Hablemos de ti- sugirió ella.
- ¿Sobre qué quieres hablar de mí, Candy? Sabes cómo ha sido mi tortuosa vida como actor, ¿no?
- Algo supe...por ejemplo...el fracaso de Macbeth en el Carnegie Hall.

Terry bajó ligeramente la cabeza.

- Eso fue terrible..
- Sí que lo fue- dijo Candy.- Las luces se apagaron cuando caíste sobre el escenario y apenas podías levantarte por la congestión...

Terry dijo con algo de vergüenza.
- Supongo que Albert te puso al tanto, ¿cierto?
- No- dijo Candy-. Yo estuve ahí.

Los ojos de Terry se llenaron de emoción.

- ¿Estuviste ahí? ¿Me viste...fracasar?
- Sí...-contestó- no sabes cómo quise levantarme del asiento e ir a levantarte a ti y decirte que era momento de recuperarte...de dar la cara...

"Si tú hubieras hecho eso, Candy"- pensaba Terry- "me habría levantado como un rayo y habría dado mi mejor cara...si hubiera tan sólo sabido que estabas ahí".

- Lamento que hayas estado ahí y me hayas visto tan mal...después de eso prometí que ya no bebería más.

- Y creo que lo has logrado. Esta noche casi no has bebido nada.

- Vaya que eres observadora, señorita Candy White Andrew...o debería decir mejor...¿Tarzan pecosa?

"Terry...escuchar eso en tus labios de nuevo es tan excitante y dulce...no lo digas de nuevo o me lanzaré a tus brazos...por favor...".

Entonces llegó hasta ellos Victoria Brownwood.

-¿Es verdad, mon cherie? ¿Te vas a quedar?

Candy miró dolorida a Terry.

- Con permiso.

Terry dijo a Victoria.

- Sí...voy a quedarme, ¿por?- preguntó tomando un cigarrillo y comenzando a encenderlo.

- Debiste haberme avisado que lo harías...

- Tú viniste porque quisiste...yo nunca te dije que volveríamos hoy...pero ya que insistes, te diré que voy a quedarme. Te llevaré de vuelva al centro.

- Terruce Grandchester. Si haces eso te odiaré siempre...

- Puedes comenzar a odiarme...-dijo Terry resuelto.

Sin embargo, Candy fue a una de las habitaciones a llorar.

Annie la alcanzó.

- Candy...¿dónde estás?

La descubrió llorando.

- Candy...¿qué sucedió.

La chica rubia respondió.

- Lo volví a perder, Annie...

- Albert me pidió que te recordara que no te irás. Que te quedarás en la mansión unos días.
- Claro...me quedaré aquí- asintió, imaginando que Terry se marcharía.

Terminó la velada con sólo Annie y Patty y al anochecer se fue a dormir muy triste, pensando que Terry se había marchado para siempre.

Pero justo a la media noche un bulto que se tambaleaba entró por una de las ventanas de la mansión.
 
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view post Posted on 8/9/2013, 08:55
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Victoria hizo la grande <_< esos 2 están a punto de colapsar que lindos :wub: se nota que se quieren mucho
 
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